“Nunca hay que olvidar de dónde venimos… que el brillo fugaz no
borre las huellas profundas del pasado… un pasado que es padre del presente y
futuro”
Llega
siendo benjamín de primer año, es el primero de su generación en apuntarse a
jugar a baloncesto… juega con los que son un año mayores que él, los del 91… al
año siguiente ya se apuntan, arrastrados por él, los de su clase y forman un
equipo… que rivalizara con el equipo formado en su mayoría por los del
Rebollet… en aquel equipo están Antoni, Xavi, Sergi Morell y unos cuántos más…
quedan en 3ª posición de la liga comarcal. En alevín me toca entrenarlo, es un
año en el que mejora bastante y empieza a hacer jugadas interesantes, aunque
los líderes son los de 2º año, Roger Mont y Vicent Antoni… su papel es destacado, es uno de los que mayor rendimiento tiene en el equipo… nos quedamos
2º en la liga… a la temporada siguiente juegan para Juan Carlos, Robert sigue
evolucionando y junto a Antoni Molina y Sergi Morell llevan la voz cantante del
equipo… pero “solo” pueden quedar terceros… en infantil unificamos a todos los
del 92, a los de Hort de Palau (Antoni, Arnau, Morell, Satyaky, Salva y el
propio Robert) y a los de Rebollet (Sergi Escriva, Jesús, Andrés) más Jordi
Benimeli y Eddy Llacer… la lástima son las bajas de jugadores como Fernando
Garí, Francesc Fuster y Javi Mengual… pero esto hace que Robert crezca a pasos
agigantados, su importancia en el equipo empieza a ser capital… juega tanto de
alero como de “4” y su juego empieza a ser espectacular.
En segundo año
infantil y primer año cadete sus anotaciones rondan los 15-16 puntos de media,
hay partidos en los que supera con creces los 20… con gran capacidad de salto
que le hace coger muchos rebotes y también finalizar contraataques con pases de
sus compañeros allí arriba donde otros no llegan… en esos momentos el
rendimiento de Robert está en su tope, aunque su potencial está aún por seguir
explotando… tengo muchas esperanzas en lo que pueda hacer al año siguiente,
siendo cadete de segundo año… las expectativas son enormes… pero llega el
verano y el Gandia se interesa por él (y por muchos de sus compañeros), la
opción de jugar en categoría autonómica es muy tentadora y acaba por irse a
jugar con el Gandia (él, Antoni y Francesc… Andrés finalmente se vuelve a
Oliva)… pero en su estancia en Gandía no acaba de acoplarse, no funciona,
apenas juega y a mitad de temporada vuelve a Oliva, no pude jugar en el cadete
por haber jugado en autonómica, así que le hacemos ficha en el Junior… pero no
es el mismo Robert que se había ido… le falta velocidad, su capacidad de salto
no es la que era, va algo perdido por el campo y ya no mete las que metía… el
problema es la confianza, la ha perdido… tiene varios años de rendimiento por
debajo de sus posibilidades, ya no es el jugador alegre que era… con el tiempo
va recuperando sensaciones, aunque muy poco a poco… llega a la categoría senior
y se hace un hueco en el Sr “B”, llega como es él, sin pelos en la lengua,
sincero y directo, dejando patente lo que le gusta y lo que no… eso le lleva a
tener discusiones con los más veteranos que no están acostumbrados a que un
rookie llegue con esa fuerza dialéctica… a mí me gusta, dice lo que piensa, no
esconde nada y eso es un “defecto” que a mí me encanta (porque no es como otros, que se quejan y luego no demuestran nada, él se queja pero en la pista intenta dar lo máximo, esa es la diferencia)… tras varios años en el
“B” se harta y decide dar un paso al frente, habla con el entrenador del “A”
para decirle que quiere jugar en el primer equipo, que hará todo lo posible por
ganarse el sitio y que aceptará los minutos que juegue… y si, cumple con
creces… se pone en forma y tiene un primer año muy positivo… el segundo año no
es tan bueno, algunas lesiones, el trabajo, etc le impiden seguir entrenando
con regularidad y pierde algo de fuelle… empieza a alternar “B” y “A”…
Robert
era un proyecto de gran jugador, destinado a marcar diferencias en el Senior…
capacidad de salto, entradas rápidas y elegantes, jugaba cerca del aro,
reboteador, muy buena muñeca para tirar de todas las posiciones… solo le
faltaba ser mejor defensor… Al final no fue el jugador que apuntaba a ser, pero
su compromiso con el club ha sido notable, le gusta el baloncesto, es un
jugador de equipo… no le importa ganar o perder, le importa hacerlo bien, que
el equipo juegue bien y lo de todo… no se deja engañar por los resultados como
tanta gente hace… entiende el baloncesto… jugador muy noble, lo da todo (esté mejor o peor) y si hay algo que te tenga que decir lo dice y se queda tan
pancho… si te gusta, bien y si no pues que te den… me encantan este tipo de
personas (y sí, he discutido muchas veces con él… como con muchos de su
generación, pero teníamos eso, que nos podíamos decir mil perrerías y a los 2
segundos olvidarnos de todo porque nos apreciábamos)
Este año ha participado en el éxito del Sr "A", ha sido uno más del grupo de campeones que han conseguido el ascenso a Nacional...
Este año ha participado en el éxito del Sr "A", ha sido uno más del grupo de campeones que han conseguido el ascenso a Nacional...
GENERACIÓN JUGONES
“Nunca hay que olvidar de dónde venimos… que el brillo fugaz no
borre las huellas profundas del pasado… un pasado que es padre del presente y
futuro”
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