Se acaba el año... y con el final de año Lebron James cumple años... pero lejos de estar en su declive a sus 33 años sigue siendo un jugador que marca diferencias... y es que a pesar del paso de las temporadas ha sabido mantenerse en el más alto nivel competitivo... y lo que es más asombroso aún, no se vislumbra que ese declive vaya a ser pronto... tenemos Lebron James para rato...
Nunca he sido un fan suyo... más bien todo lo contrario... pero el año que ganó el anillo a los Warriors tras ir perdiendo en la final 3-1 me convenció para entrar en el Olimpo de los Dioses del Baloncesto... su gesta fue Herculanea (Lebron en el Olimpo)
La Historia desde ese día le tiene un lugar reservado con letras de oro...
Hasta la fecha, con años aun por delante para engrandecer su palmares y legado... cosecha 3 anillos de campeón (cierto es que ha perdido más finales que las que ha ganado y cierto también que el camino a las finales siempre lo ha tenido más fácil al estar en la conferencia Este que en la Oeste que lleva siendo la más dura de las dos durante muchos años ya), ha logrado 3 MVPs de las finales de la NBA (igual que Magic, Duncan y Shaq)... ha ganado 4 MVPs de la Temporada Regular y muchos piensan que esta temporada caerá el quinto que lo iguale en número a Michael Jordan (Jabbar tiene 6)... tiene cantidad de records de precocidad anotadora (algo en cierto modo lógico al llegar a la NBA directamente del instituto sin pasar por la Universidad a la edad de 18 años)
No es el mejor jugador a nivel técnico, algo tosco diría yo... no es el mejor jugador en fundamentos, ni de tiro, ni de pase, ni de técnica defensiva... pero es tal su superioridad física que da igual, es capaz de defender casi que a cualquier jugador, es capaz de atacar el aro con una brutalidad sin limites y genera tanta atracción sobre él que suele encontrar muchos compañeros desmarcados en el triple a los que hacer llegar el balón... su juego ha ido creciendo con el paso de las temporadas, ha madurado y se ha hecho más completo... y eso le ha servido para mantenerse en lo más alto de la liga durante tanto tiempo.
Es un jugador cuyo cuerpo ha sido diseñado y elaborado para jugar a baloncesto... es una máquina casi perfecta.
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