Partido contra Denia es sinónimo de mucha lucha, de mucha intensidad, de mucha agresividad, de mucha energía... incluso de polémicas... y no decepcionó para nada, se cumplieron todas las expectativas... un partido que desde el principio fue una batalla por imponerse al rival... empezamos dominando en juego y marcador, estábamos en un buen momento y jugando con criterio y efectividad, destacando el acierto de Iaissa en los primeros instantes de partido que dio confianza al equipo que parecía crecerse por momentos... pero el Denia no es un equipo que se deje sorprender ni se venga abajo por estar unos minutos a merced del rival, siempre se sobreponen, siempre vuelven, siempre dan batalla y consiguieron darle la vuelta a la situación. Fueron minutos de ida y vuelta donde ellas estuvieron más acertadas y dónde hicieron valer su mayor experiencia en este tipo de partidos. Nosotras no fuimos capaces de jugar calmadas en momentos críticos, quisimos resolver demasiado rápido y demasiado individualmente, mientras las de Denia jugaron como colectivo, elaborando las jugadas hasta tener una opción de tiro óptima, incluso cuando tiran a su entrenador por doble técnica (exagerada a mi modo de ver, hay árbitros con los que no se puede hablar ni decir nada y que se piensan que son los amos del cotarro, desde el principio ya nos tocaron las narices sin dejar calentar a los equipos como se debe de hacer, si el partido de antes se alarga por lo que sea no es problema de las que juegan después, si ellos tienen un partido a las 16h en otro sitio es su problema no el de los equipos que juegan por la mañana... alguien les debería explicar que son trabajadores de la Federación, y que la Federación la forman y la pagan los clubs, además muy bien...).
Nuestras chicas lo intentaron hasta el final, pero no lograron dar ese último golpe... en el momento clave las de Denia fueron mejores que nosotras y ganaron de forma merecida. No queda otra que seguir entrenando, seguir trabajando por ser cada día mejores, ser más equipo... y aprender de estas situaciones para jugar con más calma y criterio en partidos de este calibre donde no todo es correr, intensidad, agresividad, energía... también hay que jugar con la cabeza.
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