Partido contra un fuerte rival… teníamos muchas bajos, sobre todo en la posición de
pivot donde solo contábamos con Saul… cuando el rival entra en el pabellón es
la “risa”… 2 nuestros no hacen uno de ellos… sus escoltas son tan altos como
Saul, nuestro único pivot… si en ese momento nos dicen que al acabar el partido
el resultado iba a ser de 36-47 nadie se lo hubiera creído… y más viendo los
primeros minutos de partido donde el rival en poco más de 5 minutos ya nos
ganaba de 11 puntos… la diferencia en el marcador al final del encuentro… a
partir de ahí el equipo luchó, se entregó, realizó jugadas de mucho mérito, nos ayudamos unos a otros y hubo momentos en los que parecía que incluso, con un
poco de mayor acierto a canasta nos podríamos poner en situación de disputar
realmente la victoria… una lástima que fallasemos todo lo que fallamos… pero no
se puede reprochar nada a los jugadores que se hicieron “grandes” en una
situación totalmente adversa, que no cayeron en el desánimo y que realizaron el
mejor partido de la temporada. Jugando así da igual el resultado final, como
entrenador me lo pase muy bien, disfrute con la entrega de mis jugadores en una
situación tan complicada… y la verdad es que al acabar el partido me sentía orgulloso
de ellos y esa es la mejor sensación que se puede tener con tu equipo… estas
últimas dos semanas han dado un paso adelante como equipo a pesar de las
derrotas y ese es el camino a seguir de aquí en adelante.
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