Tras quedar primeros de grupo nos tocaba
viajar a Alcoy a jugar una dura eliminatoria contra uno de los equipos que será
referente de la categoría Nacional a tenor de los fichajes que ha realizado (su
equipo es prácticamente nuevo, y cuando estén cohesionados serán muy difíciles
de parar, ya lo son).
El partido lo comenzamos muy bien, con un
fuerte ritmo defensivo y con muchas ayudas que sorprenden al rival y que nos
permiten robar varios balones y salir a la contra, no con todo el acierto que
deseáramos… perdemos muchas opciones fáciles de canasta, aunque la selección de
lanzamiento está bien realizada… el rival se sobrepone a ese inicio, gracias a
nuestra falta de acierto y a que ellos sí meten sus tiros a canasta… cobrando
ventaja pronto, 10-3 en el minuto 5 de partido que no refleja lo que está
sucediendo en el campo por parte de uno y otro equipo, pero al final todo se
resume en que la pelotita entre por el aro… Lejos de perder los nervios
seguimos a nuestro ritmo y con trabajo, esfuerzo y un mayor acierto conseguimos
reducir la diferencia a 1 punto, 14-13… cuando ya los tenemos volvemos a dejar
que se escapen, 24-15 en el minuto 9… una canasta y un triple nos acercan a 4
puntos, 24-20, pero una canasta del rival deja el marcador en un 26-20 al
finalizar el periodo…
No estamos jugando mal, estamos generando
buenas acciones aunque sin el acierto deseado, en defensa lo estamos haciendo
bien pero el acierto rival y su superioridad física dentro de la zona nos está
haciendo mucho daño. Tenemos un buen inicio de 2º periodo, triple y canasta que
nos acercan de nuevo a 1 punto, 26-25, pero cada vez que nos acercamos el rival
responde… 30-25… alternamos canastas y volvemos a acercarnos a un punto 33-32,
pero pasamos un bache y el rival consigue distanciarse 7 puntos en el marcador,
41-34 minuto 7… estamos sufriendo mucho en el rebote defensivo y en ataque nos
cuesta generar ventajas… no pasa nada, el equipo aprieta los dientes y con un
parcial de 1-8 logramos igualar el marcador al descanso, 42-42.
Hemos pasado grandes apuros pero los hemos
resuelto con calidad y entrega… llega el momento de dar un paso al frente y de
llevar la iniciativa en el juego… hemos tenido muchos problemas en el rebote y
hemos sido superados físicamente, tomamos la decisión de salir con un quinteto
fuerte y de envergadura (dentro de nuestras posibilidades), con este quinteto
conseguimos tener ventaja en varios emparejamientos (los aleros e incluso en la
posición de base, aunque en ésta no tan clara) esto nos iba a permitir hacerles
daño y que tuvieran que hacer muchas ayudas lo que nos permitiría con una buena
circulación tener muchas opciones de tiros librados… sí, todo eso era sobre el
papel… pero una cosa es la teoría y la otra la práctica… y el experimento salió
rana, peor imposible, no generamos ni una sola ventaja, jugamos a impulsos, sin
nada de control, confundiendo la velocidad con el tocino… comenzamos a fallar
un tiro tras otro, a perder balones, a precipitarnos en cada acción a lo que
añadimos el acierto del equipo rival que consigue irse en el marcador, 59-44
minuto 7 de periodo (tiempo muerto entre medias para tratar de cortar la
sangría que no funcionó, cambio de jugadores que tampoco surtieron efecto,
cambio de defensa, nada de nada… aquí no se libraba ni el delegado de equipo… todo
un despropósito) Lo peor no era el parcial que nos estaban haciendo, esto puede
pasar en baloncesto… lo peor era la forma de hacérnoslo… lo peor es que cada
error nuestro les daba alas a ellos y nos ponía una losa encima a nosotros, lo
peor es que cada error nuestro nos llevaba a cometer otro, y otro, y otro… no
fuimos capaces de cortar esa dinámica negativa, al contrario, la aumentamos con
el paso de las jugadas, todos queríamos resolver y cortar esa racha de forma
individual… está claro que la intención de los jugadores era la mejor, pero
aquí no hay un Michael Jordan o un Larry Bird capaz de dar la vuelta a esta
situación crítica por sí mismo… la solución debe ser el EQUIPO y a través del
juego colectivo saldrá la resolución individual… tenemos mucho talento en el
equipo, pero éste da sus frutos cuando el equipo funciona… cuando queremos
jugar “solos”, forzando tiros, botando en exceso el balón, jugando 1x1 sin
haber generado primero espacios y ventajas con las que poder sacar ventaja,
entonces es cuando las cosas no salen como quisiéramos… y no es cuestión de
uno, dos o tres jugadores, es una cuestión grupal… no hay culpables, la
responsabilidad es compartida por todos (entrenadores los que más)… en esos
momentos es cuando todos debemos arrimar el hombro, en esos momentos es cuando
debemos calmar el temperamento y sacar el carácter, en esos momentos es cuando
hay que controlarnos, bajar pulsaciones, mirarnos unos a otros y decirnos
“sabemos hacerlo mejor, mucho mejor… estamos juntos, vamos juntos hasta el
final” y luego se podrá ganar o perder pero siempre dando la sensación de
EQUIPO… y esto no es lo que estaba pasando en el 3º periodo que finaliza 65-52…
13 puntos de desventaja, pocos para lo que había pasado en el campo… si
hubiéramos acabado 20 puntos abajo no me hubiera sorprendido nada visto lo
visto… Cambiamos la defensa, arriesgamos y sale bien (como podría haber salido
mal)… en los primeros 6 minutos conseguimos un parcial de 3-13 que nos acerca a
3 puntos (68-65… sólo nos han conseguido anotar desde la línea de tiro libre)
en ese momento nos meten su primera canasta en juego, 70-65 a la que
respondemos con 4 puntos más, 70-69, nos vuelven a anotar una canasta 72-69 y
generan varias acciones con las que no acaban de acertar… a pesar de que la
defensa nos está dando réditos decidimos arriesgar y volver a cambiarla antes
de que el rival acierte pues ya han leído bien la situación y sólo les ha
faltado acierto… les volvemos a coger por sorpresa, varias recuperaciones y
contraataques nos ponen por delante 72-76 a falta de minuto y medio,
desperdiciamos varias acciones para aumentar la diferencia y el rival recorta
con 2 tiros libres, 74-76… nosotros también metemos los nuestros, 74-78,
entramos en el último minuto, nos meten 1 tiro libre, nos cogen el rebote pero
no meten la canasta, 75-78, contraataque y canasta que nos pone 5 arriba,
75-80… toca defender, logramos que no marquen canasta a pesar del desconcierto
en el rebote… faltan pocos segundos, tenemos balón, sacamos de pista delantera
tras tiempo muerto… nos hacen falta, metemos los 2 tiros libres… defendemos la
última posesión que acaba con un tapón de Carles Oltra faltando 4 décimas de
segundo… final de partido… 75-82. Victoria agónica.
NOTA: El ritmo de partido fue de un alto
nivel y supimos responder durante la mayor parte del encuentro… tuvimos un buen
inicio de partido a pesar de no tener el acierto deseado, pero el equipo se
mostró seguro de sí mismo y siempre jugando con intensidad de forma colectiva,
aunque los errores individuales nos estaban penalizando. No nos gustó nada el
tercer periodo, no por el desacierto, que se puede dar… no somos Bird, Jordan,
Durant o Curry… lo que no nos gustó fue la actitud, la lectura de juego, el
querer resolver un problema colectivo con soluciones individuales, no nos gustó
que los jugadores quisieran hacer más de lo que les correspondía (bastante
tienen con hacer bien lo que pueden y deben de hacer para tratar de hacer cosas
que se les escapa)… y lo que menos nos gustó es la actitud negativa en esa fase
complicada… estar cuando las cosas salen bien es fácil, es cuando las cosas no
salen como nos gustaría cuando se demuestra el verdadero carácter de los
jugadores, cuando el equipo está por encima de todo interés individual… si esta
victoria no sirve para darnos cuenta de ello no habrá servido de nada… si esta
victoria esconde la realidad del juego será la primera palada del agujero de
nuestra tumba. La victoria suele cegar, que no sea el caso. Mucho por mejorar…
esta victoria fue milagrosa (si, está victoria fue gracias al talento de los
jugadores, a su carácter ganador y a que fueron capaces de revolverse en el
fango y sacar lo mejor que llevan dentro)… pero si este partido se repitiera
100 veces quizás ganaríamos 2 o 3 veces y perderíamos las otras 97… que la
victoria nos ayude a crecer como equipo y que no nos haga pensar que somos
mejores de lo que realmente fuimos.
En el clavo. Soy la primera que saltó de alegría cuando sonó el final del partido, pero también hay que reconocer lo duro que fue el partido, el terror que provocó el fatídico tercer cuarto. Tenemos un equipo para dar mucho que hablar, pero no hay que perder de vista que vamos a movernos entre lobos, todos con hambre, todos con dientes afilados. ¡¡¡ÁNIMO EQUIPO!!!
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