A pesar de encontrarse en un buen momento para seguir jugando decidió colgar las botas hace tres temporadas y enfocar su futuro en el baloncesto hacia la función de entrenador. Volvió a su casa, al Valencia Basket, a esa cantera de donde salió y allí, junto a otros entrenadores, comenzó a adquirir una experiencia y unos conocimientos prácticos necesarios para lanzarse a la aventura de entrenar.
Tras dos temporadas como ayudante el club decidió darle la oportunidad de dirigir como Primero al equipo de Liga EBA, una plantilla formada por jugadores muy jóvenes y a los cuales además de enseñarles el juego Rubén Burgos les transmite su experiencia en la profesión de jugador.
Les enseña el oficio. “Hay diferentes fases en la formación y no es lo mismo trabajar con infantiles o cadetes que con chavales de dieciséis años en adelante que ya están en la transición del baloncesto junior al profesional. A ese perfil de jugador sí hay que indicarle de qué va el baloncesto, los diferentes tipos de compañeros que se encontrarán, los diferentes tipos de entrenadores que los dirigirán. Esa labor de enseñar la profesión sí que creo es muy importante y ahí puedo ayudar. En lo otro, en lo que es enseñanza de baloncesto de pista, estoy en más en fase de aprender de otros entrenadores del club, del jefe de cantera, de ver cómo trabaja el primer equipo que de lo que yo pueda enseñar a los jugadores”.
Reconocimiento sincero de un exjugador ACB ahora entrenador y alumno del CES 2013. “No quiero desprenderme del todo de la esencia de jugador porque pienso que haber sido profesional durante muchos años es un activo que puede ayudar en la posterior labor de entrenador. Aunque sí me he dado cuenta de que jugar era más fácil que entrenar…”
Tras dos temporadas como ayudante el club decidió darle la oportunidad de dirigir como Primero al equipo de Liga EBA, una plantilla formada por jugadores muy jóvenes y a los cuales además de enseñarles el juego Rubén Burgos les transmite su experiencia en la profesión de jugador.
Les enseña el oficio. “Hay diferentes fases en la formación y no es lo mismo trabajar con infantiles o cadetes que con chavales de dieciséis años en adelante que ya están en la transición del baloncesto junior al profesional. A ese perfil de jugador sí hay que indicarle de qué va el baloncesto, los diferentes tipos de compañeros que se encontrarán, los diferentes tipos de entrenadores que los dirigirán. Esa labor de enseñar la profesión sí que creo es muy importante y ahí puedo ayudar. En lo otro, en lo que es enseñanza de baloncesto de pista, estoy en más en fase de aprender de otros entrenadores del club, del jefe de cantera, de ver cómo trabaja el primer equipo que de lo que yo pueda enseñar a los jugadores”.
Reconocimiento sincero de un exjugador ACB ahora entrenador y alumno del CES 2013. “No quiero desprenderme del todo de la esencia de jugador porque pienso que haber sido profesional durante muchos años es un activo que puede ayudar en la posterior labor de entrenador. Aunque sí me he dado cuenta de que jugar era más fácil que entrenar…”
ENTRENAR COMO FORMA DE VIDA
Y esa afirmación – jugar es más fácil que entrenar - que utilizamos a modo de titular de la entrevista Rubén Burgos la argumenta en base a las nuevas sensaciones con las que se esta acostumbrando a convivir.
De hecho, decía un maestro como Moncho Monsalve que “entrenar es una forma de vida”… “Estoy de acuerdo” afirma Rubén. “Ahora entiendo a ese entrenador que lo veías solo, tomando un café durante una hora, y te preguntabas… ¿qué esta haciendo? Pues lo que hacía era pensar en su equipo. Eso sólo lo entiendes cuando entrenas, no cuando juegas. Cuando eres jugador te limitas a pensar en tu faceta, en tus problemas como jugador y desde ahí intentas ayudar al equipo. Pero cuando entrenas piensas en todos y cada uno de los jugadores, en todos y cada uno de los aspectos del juego del equipo. Creo que al principio sufres más y, a medida que vas adquiriendo nuevos conocimientos, nuevas herramientas, disfrutas más”.
De hecho, decía un maestro como Moncho Monsalve que “entrenar es una forma de vida”… “Estoy de acuerdo” afirma Rubén. “Ahora entiendo a ese entrenador que lo veías solo, tomando un café durante una hora, y te preguntabas… ¿qué esta haciendo? Pues lo que hacía era pensar en su equipo. Eso sólo lo entiendes cuando entrenas, no cuando juegas. Cuando eres jugador te limitas a pensar en tu faceta, en tus problemas como jugador y desde ahí intentas ayudar al equipo. Pero cuando entrenas piensas en todos y cada uno de los jugadores, en todos y cada uno de los aspectos del juego del equipo. Creo que al principio sufres más y, a medida que vas adquiriendo nuevos conocimientos, nuevas herramientas, disfrutas más”.
Burgos tiene su nueva actividad metida en la cabeza y transmite ilusión cuando la explica. Sí, me parece que ya le ha picado ese bicho que envenena a los entrenadores y los convierte en obsesos de su labor.“El baloncesto tiende hacia la especificación de los jugadores, que han de dominar los aspectos generales del juego pero ser muy buenos en dos o tres concretos y adecuados a sus características y su posición”…
Será uno de los alumnos del CES2013 y, tal como hacia cuando jugaba, “me tomaré el Curso como siempre he hecho en vida como deportista, al cien por cien. No sé hacer las cosas a medias y ese Curso quiero vivirlo al máximo”.
Será uno de los alumnos del CES2013 y, tal como hacia cuando jugaba, “me tomaré el Curso como siempre he hecho en vida como deportista, al cien por cien. No sé hacer las cosas a medias y ese Curso quiero vivirlo al máximo”.
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