HIstóric@s: Cecilia Siliato Robles #8

“Nunca hay que olvidar de dónde venimos… que el brillo fugaz no borre las huellas profundas del pasado… un pasado que es padre del presente y futuro”

Hoy toca hablar de la alegría del equipo… una jugadora a la que le sacamos no sé cuantos apodos… los que mejor la definían eran “risitas” y “dos pistolas”… sin Ceci este equipo no hubiera sido el mismo, era la jugadora que daba buen ambiente en cualquier situación por crítica que fuera… pero vayamos por partes y comencemos desde el inicio… llega al Oliva siendo una renacuaja y forma parte de uno de los equipos mixtos que habían en benjamín, tras varios años jugando con chicos pasa a formar parte del equipo femenino que creamos… es una de las 4 jugadoras que ha estado desde el principio hasta el final (con Glòria, María y Olaya)… sus inicios son muy buenos, era una jugadora que se esforzaba mucho y era capaz de hacer lo que se le pedía, además era muy rápida y solía ser de las primeras en salir al contraataque, tenía una buena arrancada y eso le hacía coger ventaja sobre las defensoras que siempre se despistaban en el balance, en ese primer año hizo muchos contraataques… pero enseguida se desarrollo, creció, perdió esa punta de velocidad y tuvo que variar su juego… se convirtió en una pívot pura, podía jugar de “4” o de “5” pero ya no podía jugar de “3”… al principio le costó aclimatarse, no porque fuera complicada esa transición, creó que al no conseguir meter las canastas que hacía antes gracias a los contraataques pensaba que no estaba rindiendo al nivel que debía, pero no era así… su cuerpo había cambiado y por lo tanto su función debía ser otra… y aunque no fuera tan vistosa como la anterior (meter canasta siempre es más vistoso) cumplía con lo que el equipo necesitaba. Para coger más confianza en ella misma el 3º año, en el que hicimos dos equipos, mientras subimos a Glòria, María y Olaya al cadete a ella la dejamos en el equipo infantil, donde haría de capitana y sería una de las referentes del equipo con Angels y Naomi, además de doblar siempre que pudiera con las cadetes… el objetivo era que con esa responsabilidad y más minutos de juego de los que tendría en el cadete aumentará su rendimiento, mejorase en auto-confianza y creciera como jugadora. Fue un año muy bueno para ella y tras conseguir el ascenso tanto con el infantil como con el cadete a la temporada siguiente, una vez unificado el equipo, se convirtió en la pívot titular del equipo junto con Ester… No era una pívot que hiciera muchos puntos, pero siempre se sacaba de la manga algún gancho… alguno lo hubiera firmado el mismo Kareem Abdul-Jabbar… era una jugadora que hacía las canastas más complicadas y luego en las sencillas fallaba… cada una es como es… con el paso de los años empezó a tirar de posiciones exteriores y aunque no era su fuerte no lo hacía mal del todo y algunos triples sí que nos ha dado…

En defensa era mucho más importante, era una pívot que podía defender en las zonas presionantes que hacíamos en todo el campo, sabía colocarse y era agresiva en sus desplazamientos, sabía hacer los 2x1, los hacía con intensidad y determinación, sin miedo a que le pitasen falta… a veces las cometía por llegar algo tarde o por excederse en su ímpetu, pero eso nos daba un plus de intensidad y agresividad en defensa que siempre nos venía bien… era capaz de defender por delante a jugadoras más grandes que ella y cuando se ponía las pilas era muy difícil de superar en el juego de 1x1 en el poste… era de las mejores defendiendo el bloqueo directo, salía con determinación y contundencia... algo que debía mejorar era en los rebotes, a veces su ímpetu por defender fuerte hacía que perdiera la posición en el rebote… pero no iba a decirle que bajara el nivel defensivo cuando eso nos daba tanto a la larga… 

Pero lo mejor de ella era su carácter, su forma de ser, la alegría que nos transmitía a todos, su sonrisa quitaba presión a todo el equipo en momentos complicados, ya fuera en partidos o en entrenes… una jugadora querida por todas sus compañeras, ninguna puede decir nada malo de ella, ni una sola cosa… es imposible… Era el pegamento del equipo… en todos los equipos dentro del grupo siempre hay sub-grupos, gente con la que tienes más afinidad, te llevas mejor o con gustos más parecidos fuera del basket… Ceci congeniaba con todas, y eso es tremendamente complicado… si, era el pegamento que nos unía a todas… sin ella nada hubiera sido lo mismo... además su compromiso y lealtad con el equipo siempre ha sido total, una persona muy sentimental que nos entregó su corazón...   

Ceci es ese “amoret” que todos queremos tener en nuestras vidas.

Cecilia era "el alma" del equipo... la jugadora que nos daba vida... la que con su carácter y sonrisa, la que con su forma de entender el juego y el deporte, nos daba una visión positiva... 

A veces nos derrumbamos hasta tal punto que incluso la idea de felicidad nos asusta... los ojos del corazón se acostumbran a la oscuridad... pero hay personas que con su forma de ser, con sus sonrisas y alegría te sacan de ese estado... Cecilia es una de esas personas... con ella no hay oscuridad que no quede eclipsada por una luz repleta de esperanza. 

 “Nunca hay que olvidar de dónde venimos… que el brillo fugaz no borre las huellas profundas del pasado… un pasado que es padre del presente y futuro”