Nos volvíamos a enfrentar al Calpe en esta segunda fase. Los dos partidos anteriores nos los habíamos repartido con una victoria para cada equipo. Esta vez el Calpe en lugar de jugar con 10 jugadores lo hacía con una rotación de 9 jugadores.
El partido lo comenzamos con mucha confianza a la hora de atacar la canasta rival, corriendo con velocidad, siendo rápidos a la hora de sacar los contraataques y jugando con determinación lo que nos permite anotar 20 puntos en el primer periodo... en defensa nos meten 8 puntos, pero 6 de ellos son regalos defensivos por no defender con piernas y cuerpo... son regalos que no se deben de permitir... 20-8.
En el segundo periodo en defensa seguimos regalando y si a eso le añadimos unos ataques lentos, espesos, sin ideas, con perdidas continuas el resultado es que nos devuelven el parcial con un 4-16 para igualar el marcador... se puede fallar en ataque, pero no podemos escondernos, no podemos dejar de participar... y en defensa no podemos estar tan flojos, nos atacan por el centro superando a 4 de los nuestros a los que solo tienen que sortear las manos, demasiado fácil para el rival que lo aprovecha para cortar nuestra defensa como un cuchillo haría con la mantequilla...
A partir de ese momento el partido pasa a ser dominado por el equipo rival, que se va creciendo al ver su superioridad en ataque (lógico con todas las facilidades que les damos a la hora de entrar a canasta, de llegar debajo del aro, de tirar cómodos y de coger un rebote tras otro) y nosotros vamos bajando nuestras prestaciones... el partido se va poniendo muy cuesta arriba y cuando queremos reaccionar es un quiero y no puedo... no dejamos de intentarlo, no dejamos de creer... pero el estropicio ya no está hecho... debemos aprender de este partido... un partido nunca se gana en un periodo, pero se puede perder en un visto y no visto... cuando las cosas no salen como queremos la defensa es la que nos debe mantener en el partido... y es en la defensa donde hemos fallado durante muchos minutos, eso es lo que más rabia me da como entrenador... puedo aceptar perder porque fallemos tiros (todos fallamos), porque el rival acierte más desde línea exterior... pero no podemos aceptar que nos lleguen con tanta facilidad a zonas peligrosas... y lo han hecho como Pedro por su casa... habrá que seguir mejorando para evitar repetir esta situación.
Felicitar al rival porque ha sido superior a nosotros y han jugado con más oficio, más unidos en defensa y con mayor visión en ataque.
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