Esta semana nos tocaba jugar en casa, lo hacíamos contra el Gandia basquet, un partido que siempre tiene el aliciente de jugar contra nuestros vecinos, un derby en toda regla y en los derbys hay algo más que baloncesto, aunque a estas edades aún no lo tienen asimilado los jugadores... y eso está bien, le quita el dramatismos y el pique que hay en categorías superiores.
El partido era a puerta cerrada, pero pusimos en marcha el hacer los partidos en directo por el facebook para que los familiares lo pudieran ver desde el móvil y desde las televisiones en su casa... al parecer la iniciativa ha surtido efecto y el partido lo pudieron ver perfectamente desde sus dispositivos.
El partido fue dominado desde el principio por los jugadores locales, el Oliva impuso un ritmo muy alto en defensa y mucha generosidad en ataque donde vimos jugadas rápidas, eléctricas, con pases rápidos con los que desbordamos al rival... nos costó meter las primeras canastas, desperdiciamos muchas ocasiones, pero el ritmo era el adecuado y cuando comenzaron a entrar ya fueron una detrás de otra... tuvimos una primera parte de mucho nivel, tres periodos donde todos jugaron con energía, con intensidad, con gana de hacer las cosas bien, de forma coordinada y cooperativa, sabiendo ver a los compañeros mejor colocados, teniendo siempre un pase más para una mejor posición... daba gusto verlos jugar por momentos... eso cambio en el cuarto y quinto periodos, donde ya no fuimos tan generosos, donde abusamos del bote de balón, donde ya no veíamos al jugador que mejor estaba colocado, donde nos faltaba un pase extra y nos sobraban dos botes de balón... quizás fuera por el resultado, ya demasiado abultado, el exceso de confianza o las ganas del jugador de querer "hacer su jugada" muy típico en todos nosotros y más aún en los niños, algo que debemos aceptar como lógico pero que debemos corregir si queremos convertirnos en un gran equipo, si queremos crecer como un equipo en mayúsculas donde el "yo" siempre esté supeditado al "nosotros".
El marcador se cerro en un 49-8... fue un partido donde nuestros chicos demostraron su calidad, pero que no debe hacer que se confíen para próximos retos.
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