No vendría mal recordar un artículo de hace 8 años escrito en su día por un entrenador de prestigio nacional e internacional a cerca de lo que es realmente un jugador estrella y de lo que no lo es,.. porque tenemos muchos casos de jugadores estrellas en nuestros equipos,.. o al menos se comportan como tales,.. y ¿son realmente estrellas?,.. aunque el artículo sea antiguo sigue vigente como ejemplo,.. los nombres de aquellos días pueden ser sustituidos facilmente por nombres de la actualidad,.. solo habría que pararse a pensar un poquito,..
El jugador estrella
Por Aíto García Reneses
Enero de 2.001
He ido aplazando la escritura de este artículo porque en esta temporada he percibido que no existía una discrepancia de la opinión mayoritaria con mi postura. Cuando esta discrepancia con la mayoría de la gente que opina públicamente existe, tengo "la necesidad imperiosa" de escribir un artículo para quedarme tranquilo. En muchas ocasiones he sentido esa "necesidad" en temas similares al de hoy. Aunque el tema general es independiente del caso Seikaly, haré algunas referencias a él.
- Seikaly:
Esta temporada teníamos la aspiración de que Rony Seikaly fuese el jugador estrella del equipo pero no ha podido ser. Contrariamente a lo que ha sucedido en otras ocasiones su caso no ha sido utilizado, excepto por una minoría, para atacarme. Además, el público no estaba por la labor. Tengo que resaltar, sin embargo, que un medio de comunicación que generalmente utilizaba cualquier motivo para "meterme caña" en este caso ha sido todo lo contrario, eso les honra. (No cito el nombre porque antes tampoco lo hice).
¿Cuál ha sido la razón de que en este caso no hayan cuajado los ataques?. Creo que en este caso casi todo ha transcurrido cara al público: en los partidos. Hasta el partido de Londres había jugado más minutos, con diferencia, que cualquier otro jugador del equipo a pesar de ser el peor en algunos aspectos como, por ejemplo, balones perdidos y porcentajes de tiro -con más tiros que ningún otro jugador-.
También el público veía su talante en los partidos y no necesitaba "informaciones" adicionales.
Creo que el jugador intentó seriamente ponerse en forma pero no lo consiguió. Le pesó en demasía llevar un par de temporadas sin ritmo de competición y no tuvo paciencia para seguir intentándolo. Y, probablemente, también, le perjudicó el pensamiento previo de que todo sería mucho más fácil en el baloncesto europeo. Nosotros pensábamos que podía coger esa forma en algo más de tiempo.
- La estrella
Cada día es más difícil ser un jugador estrella, no porque no hayan jugadores muy buenos sino porque el nivel general es mucho mejor que antaño y es mucho más difícil destacar claramente. Es cada vez más frecuente que algún jugador destaque, sólamente, en alguna faceta del juego pero es difícil que lo haga en la mayoría de los aspectos del juego para así poderle considerar justificadamente la estrella de un equipo.
Por otra parte, al público tradicionalmente le gusta (me incluyo cuando soy espectador) atribuir a una persona el éxito aunque éste sea conseguido por un equipo. Ello provoca en muchas ocasiones desvirtuar lo que es justo, dentro del valor proporcional de cada uno de los miembros de un colectivo, para ensalzar a uno en detrimento de la valía de los demás.
No obstante, eso tiene sus ventajas para un equipo, siempre y cuando los "perjudicados" acepten de buen grado su "minusvalorización" pública. La gente se identifica y sigue más a ese equipo. Otra ventaja es que los árbitros, generalmente, protegen al "idolo" y los resultados pueden ser mejores.
Pero, ¿qué es realmente un jugador estrella?. Pues un jugador que sea el referente de su equipo, que lidere técnica y humanamente a sus compañeros. Además de tener calidad técnica y humana para hacerlo hace falta una dosis muy importante de sacrificio, pues la admiración dentro de un grupo no se produce si no es, también, el que más trabaja.
Hay muchos jugadores que querrían ser la estrella de su equipo en base a su calidad en algunos aspectos del juego pero no lo consiguen porque su nivel de entrega no es suficiente para ser admirados por sus compañeros. Otra cosa es que la sensación de estrella exista en el exterior pero para esto influyen otros factores como la espectacularidad de sus acciones y el "marketing" que tenga.
En muchas ocasiones me han catalogado como un entrenador al que no le gusta el jugador estrella. Como espectador me gusta casi siempre, y como entrenador cuando realmente es una estrella. Afortunadamante, he tenido en mi equipo a estrellas reales, es decir, los que han sido elegidos como mejor jugador de las finales de la Liga ACB, o de la Liga Europea: Epi, Norris, Xavi Fernández, Dueñas, Karnisovas, Djordjevic..., sin embargo muchos me han atribuido el cartel de "antiestrellas" porque los que ellos consideran estrellas, aunque no triunfen en ningún sitio, no los quiero.
No obstante, si que es cierto que no me gustan algunos jugadores que son estrellas en sus equipos. Ésto sucede con equipos que dan más preferencia al rendimiento de su jugador estrella que al del propio equipo. No soy partidario de ese tipo de jugadores, ni de ese tipo de equipos, pero si soy partidario de las estrellas reales que he tenido y de otras. Sirva como mejor referencia Michael Jordan que ha sido el jugador más estrella del mundo: tanto en los aspectos más apreciables a primera vista, sus canastas y sus vuelos sin motor, como en los menos apreciables como su defensa, su concentración, su compañerismo...
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